Vivimos en una sociedad que "consume" absolutamente todo lo que se pone a su alrededor.
Según la Real Academia de la Lengua una de las definiciones de CONSUMIR es 1. tr. Destruir, extinguir. U. t. c. prnl.
El “slow travel” es conocer bien un sitio en muchos días, en vez de conocer muchos sitios superficialmente.
El "fast travel" consiste en estar en la máxima cantidad de sitios posible en el mínimo tiempo.
Está claro que bajo este prisma, en un mundo que cada vez más quiere convergir hacia la sostenibilidad, no se trata del mejor modelo turístico.
Los amantes de emociones fuertes buscan la inmediatez de las sensaciones y la mejor forma de obtenerlas de forma concatenada es estando en muchos sitios a la vez, aunque a posteriori uno se de cuenta que no ha sido la mejor experiencia, ya que no ha resultado tan agradable como se esperaba(largos desplazamientos, esperas en aeropuertos, sensación de estar permanentemente haciendo "cola", comida rápida, ...)
El marketing de la experiencia invita al cliente a vivir sensaciones diferentes y placenteras a partir de los productos, bienes o servicios, que ofrecen las empresas. Se han de generar experiencias respecto a la percepción, sentimiento, pensamiento, acción y relación.
Nace así el concepto de “Slow Travel”, que es más un enfoque distinto del viaje que una forma de viajar. Se anima a las personas a disfrutar de lo que hacen, en este caso viajar, pudiendo así apreciar los detalles de los sitios que visitan. Es más una inmersión en el destino que un sobrevuelo de varios lugares.
El “Slow Travel” prefiere las ciudades pequeñas y los pueblos a las grandes concentraciones humanas. Prefiere los alojamientos rurales y que el viaje se haga en tren, barco o coche pero sin abusar de las autopistas. Parando de vez en cuando para conocer por dónde vamos, y cómo va cambiando el paisaje campestre y humano mientras viajamos.
sábado, 4 de octubre de 2008
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